Madrid, 07 de marzo de 2024: El cardenal arzobispo de Madrid José Cobo, el obispo de Getafe, Ginés García Beltrán y el obispo de Alcalá de Henares, Antonio Prieto Lucena han enviado una nota este jueves dirigiéndose a la Iglesia que peregrina en estas diócesis, a la sociedad de la que forman parte y a las personas y administraciones que tienen algún tipo de responsabilidad pública en el ámbito de las migraciones, con el fin de compartir algunas inquietudes y alentar la buena práctica de la acogida y la hospitalidad.
En el escrito constatan que son muchas las trabas con las que las personas migradas y solicitantes de asilo se encuentran al llegar aquí a la hora de desarrollar su proyecto vital.
Plan coordinado de intervención entre las administraciones
José Cobo, Ginés García Beltrán y Antonio Prieto muestran su preocupación por la opacidad de la gestión que están realizando las instituciones que están implicadas en lugares como el Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, donde había un claro “problema estructural de imprevisión y de desatención” hacia las personas solicitantes de asilo, tanto para los recién llegados como para aquellos que desde hace tiempo tienen en el aeropuerto su lugar de refugio. También para los que han sido alojados en el Acuartelamiento Primo de Rivera, de Alcalá de Henares, que venían de la operación que hace unos meses distribuyó a personas migrantes llegadas de las costas canarias por diferentes lugares de la Península, o la realidad que se vive actualmente al reabrir el Centro de Internamiento de Extranjeros de Aluche.
«Desconocemos si se ha desplegado algún plan coordinado de intervención entre las administraciones».
Regularización extraordinaria
Los obispos diocesanos de la Provincia Eclesiástica de Madrid plantean que se estudie una regularización extraordinaria para aquellas personas desplazadas durante varios años y que se encuentran en un limbo jurídico donde se dificulta su acceso al mercado laboral en plenitud de derechos y deberes.
En su nota proponen “que se aborden vías de entrada a nuestro país seguras, ágiles y regulares que eviten el sufrimiento y la descohesión social” y reiteran las graves dificultades que las personas migradas encuentran para acceder a una primera cita para solicitar la protección internacional o asilo y las complicaciones para renovar las documentaciones: «Sin citas no hay derechos». De esta realidad se aprovechan las mafias y los que explotan su vulnerabilidad.
Agradecimiento, esperanza y compromiso
Los obispos diocesanos de Madrid, junto con el papa Francisco, hacen una llamada ilusionada al agradecimiento, a la esperanza y al compromiso.“ Agradecimiento a todas las personas, entidades y organizaciones, tanto del ámbito eclesial como del civil, que trabajan generosamente en el acompañamiento a las personas migradas, en su integración y dignificación. Esperanza que nos estimula a construir la Casa Común de la que todas las personas formamos parte y de la que nadie debiera ser excluido. Compromiso activo y eficaz, cada cual, desde su propio ámbito y realidad, para ser una Iglesia y sociedad samaritanas que hagan del cuidado un signo de identidad”.
