Madrid, 17 de septiembre de 2021 (IVICON); Después de haber disfrutado de unos merecidos días de descanso, durante las vacaciones estivales, afrontamos el mes de septiembre con renovado entusiasmo.
Volvemos a la rutina del trabajo, sin que esto signifique una vuelta aburrida o repetición de trámites y actuaciones, sino que lo vivamos con alegría, responsabilidad y sabiendo que, de nosotros, dependerá el trabajo bien hecho al servicio de los demás.
Sin darnos cuenta, coincide con el epígrafe de Patris Corde, donde se habla de José como el Padre trabajador. Veamos pues, si nos puede inspirar de cara al nuevo curso.
En este comentario artístico realizado por Margarita Yustres, Licenciada en Humanidades nos apoyaremos en una imagen poco común, realizada en el s. XVII (1655) y que se conserva en el Museo Nacional de Escultura (Valladolid). Se trata de los denominados “escaparates”, espacios reducidos, con fondos arquitectónicos o paisajísticos, que se llevaron a cabo con un material dúctil, como la cera, maderas nobles y telas encoladas.
Ciertamente, si hay un aspecto que siempre se destaca de san José, en una gran mayoría de escritos, es que era un hombre trabajador, un hombre obrero (como la festividad celebrada en nuestro calendario laboral).
Pidamos a san José, que nos acompañe en este nuevo curso que comenzamos, que nos renueve la mirada para estar atentos y comprometidos con los que más lo necesitan.
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