El presidente de la CEE dirige su mirada, en su discurso inaugural de la asamblea plenaria, a la vida como pastores de la iglesia de los obispos

Madrid, 4 de marzo de 2024 (IVICON): Del 4 al 8 de marzo se celebra en Añastro la 124ª Asamblea Plenaria de los obispos españoles. En esta reunión se renovarán todas las responsabilidades excepto de la secretario general.

El presidente de la CEE y arzobispo de Barcelona, Juan José Omella ha inaugurado la sesión este lunes con un discurso en el que ha mostrado su firme apoyo hacia el papa Francisco, recordando, tal y como dice el pontífice, que nos hace bien contemplar a Jesús que sale al encuentro de la humanidad herida. “Los obispos hemos sido particularmente llamados por Cristo a ser portadores de esa esperanza y esa sanación en un mundo “herido”, que sufre ante la violencia, la polarización y la desigualdad”.

La CEE está y quiere estar con el pastor, que es el Papa. “Debemos alimentar la comunión con el Romano Pontífice y con los demás hermanos obispos, especialmente dentro de la misma Conferencia Episcopal y Provincia eclesiástica”.  

Elegidos para servir

El arzobispo de Barcelona ha compartido con los asistentes algunos aspectos que san Juan Pablo II propone en Pastores gregis.

“El obispo, según san Juan Pablo II, es el primero que, en su camino espiritual, tiene el cometido de ser promotor y animador de una espiritualidad de comunión. Debe esforzarse incansablemente para que esta espiritualidad sea «uno de los principios educativos de fondo en todos los ámbitos en que se modela al hombre y al cristiano»”.

Caminar hacia la meta

Juan José Omella ha compartido las palabras de san Pablo en las que pone en consideración: «Lo que quiero es conocer a Cristo, sentir en mí el poder de su resurrección, tomar parte en sus sufrimientos y llegar a ser como él en su muerte, con la esperanza de alcanzar la resurrección de los muertos. […] Hermanos, no creo haberlo alcanzado aún; lo que sí hago es olvidarme de lo que queda atrás y esforzarme por alcanzar lo que está delante, para llegar a la meta y ganar el premio que Dios nos llama a recibir por medio de Cristo Jesús».

Para finalizar su intervención ha rogado a Dios que los trabajos de estos días ayuden a vivir estrechamente la comunión; y que les permitan seguir anunciando la Buena Nueva con esperanza, humildad, valentía y alegría.

Tras el discurso del hasta ahora presidente de la CEE ha tomado la palabra en nombre del nuncio apostólico en España, el consejero de nunciatura Monseñor Roman Walczak, que ha agradecido el gesto de comunicación que Omella ha tenido con el santo padre y ha trasladado el agradecimiento del nuncio por la diligencia en el servicio prestado a la Iglesia.  

Discurso en vídeo

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