Madrid, 9 de marzo de 2015 (IVICON).- Bajo el lema “Una vida extraordinaria” la Congregación Santo Domingo celebra este año 2015 el centenario de la muerte de su fundadora, Teresa Titos Garzón. Granadina de nacimiento, mujer apasionada por la verdad, supo hacer de su espiritualidad un camino de encuentro con el Señor de la vida, que la invita a ver más allá de un pequeño beaterio situado en el Barrio del Realejo, para dar forma a un proyecto llamado Congregación Santo Domingo. Desde que Teresa es elegida superiora del beaterio en 1883, descubre que Dios la llama para realizar grandes sueños. Su marcada personalidad, su audacia y decisión le llevan a leer y discernir los signos de los tiempos, unos tiempos difíciles en la historia convulsa de la España de finales del XIX.
Mujer de ojos abiertos, a ejemplo de Santo Domingo, descubre a Jesús en la contemplación, la oración diaria, la vida comunitaria y la predicación del Evangelio para la salvación de las almas. La pasión de Teresa por la educación le mueve a formar y educar a los más pobres y desfavorecidos, especialmente a la mujer. Las hermanas presentes en diferentes lugares del mundo continúan haciendo visible el rostro de Teresa Titos, sierva de Dios, allí dónde la misión al servicio del Evangelio se hace necesaria.
Celebrar un siglo de existencia significa aprender y agradecer la historia vivida, discernir en el presente las huellas de Dios en una humanidad que sufre y abrirnos a un futuro a la vez incierto y prometedor. Con este Centenario, la Congregación Santo Domingo, recuerda este tiempo de gracia vivido en espacios, lugares y situaciones diferentes, que nos han llevado a alcanzar nuestra personalidad, nuestro ser, nuestro hoy. Para vivir el presente con pasión y el futuro con esperanza, no podemos olvidar nuestros orígenes, nuestras raíces, la tierra de dónde hemos brotado, para poder fecundar, como Teresa Titos, y seguir llevando la Buena Noticia hasta los confines de la tierra.